"Pese a las carencias que tiene, es "mi" plaza" (Javier Prieto)


El coso de Buenavista es otro mundo. Durante muchos años (del 94 al 2000) se regalaba todo el aforo, para lograr que la gente fuese volviendo a la plaza. Con la llegada de Sarot S.L. se empezó a cobrar la sombra. La consecuencia de los años del gratis total, es que actualmente acude muy poca gente pasando por taquilla. El público -jubilados, en su mayoría - se hacina en la solanera, mientras la afición por unos pocos euros disfruta de la comodidad de la sombra. Los "invitados" van, generosos, predispuestos al regalo de trofeos, y se marchan enfadados cuando consideran escaso el número de orejas. La afición de sombra quiere que suba el nivel de presentación del ganado, algo que se ha logrado en los últimos años, cuando el encargado de comprar los toros para Oviedo ha sido Lázaro Carmona.
En los últimos años han sido importantes los triunfos de José Ignacio Uceda Leal, cuyas fotos pueden verse en la sección dedicada a este torero.

Tras la marcha de la empresa Sarot al finalizar su contrato de cuatro años, el Ayuntamiento decidió, sin saberse aún los motivos, adjudicar la plaza directamente a la empresa Taurotoro. Esta empresa ha duplicado el precio de las entradas y el Ayuntamiento le ha reducido el número de entradas que se compran, pero no el montante total de la subvención. Unido esto a unos carteles populistas la gente comenzó a acudir al coso de Buenavista, llegando incluso en San Mateo del 2004 a registrarse un lleno de "no hay billetes" con el cartel de Jesulín, El Cordobés y Rivera Ordóñez, terna que repetiría en mayo de 2005 por la Feria de La Ascensión, con una respuesta mucho menor en taquilla de la habida en la feria mateína. Lo más destacado de los tres festejos celebrados hasta la fecha por Taurotoro, fue la sensacional faena de Cayetano a su primer novillo de Torrealta.

 

(Javier Prieto)